Cómo el Compliance penal ayuda a prevenir el alzamiento de bienes
El alzamiento de bienes es un delito que puede repercutir de forma aciaga sobre la estabilidad financiera y la reputación de cualquier empresa.
En el ámbito jurídico español, su prevención es una prioridad estratégica, especialmente para empresarios y propietarios de negocios que no son conscientes de los riesgos penales y económicos en los que pueden llegar a estar implicados.
Aquí es donde deberías empezar a pensar en poner en marcha un programa de compliance penal.
Al fin y al cabo, será un aliado esencial para proteger tu empresa y transmitir confianza a tus clientes.
¿Qué es el alzamiento de bienes y por qué preocupa tanto a las empresas?
El alzamiento de bienes, está recogido y tipificado como delito en el artículo 257 del Código Penal español.
Consiste en ocultar, destruir o transferir bienes con el objetivo de eludir el pago de deudas a acreedores. Algo que aunque lo desconozcas es muy habitual a nivel empresarial.
Esta conducta no solo es ilegal, sino que es un delito. Puede acarrear penas de prisión, multas y pérdidas reputacionales irreparables para tu empresa.
Cuando se comete este delito en un entorno empresarial, las consecuencias pueden extenderse a los socios, directivos e incluso a la propia persona jurídica.
El compliance penal: una barrera efectiva frente al riesgo
El compliance penal no es solo un conjunto de normas internas para tu empresa, se convierte en un sistema integral de prevención de delitos.
Aplicado correctamente, permite detectar y evitar situaciones que podrían derivar en responsabilidades penales de consecuencias irreparables.
Mecanismos concretos de prevención del alzamiento de bienes
- Identificación de riesgos reales: Cada empresa tiene unas vulnerabilidades específicas. Un programa de compliance bien diseñado permite mapear los puntos críticos donde podrían surgir conductas delictivas, tales como el alzamiento de bienes.
- Controles internos y trazabilidad: Documentar todas las operaciones patrimoniales reduce de forma importante las posibilidades de realizar movimientos opacos o sospechosos.
- Formación y cultura de cumplimiento: Concienciar a empleados y directivos sobre los riesgos y consecuencias de cometer un delito, crea un entorno corporativo más ético y legalmente seguro.
- Canales de denuncia confidenciales: La detección temprana de irregularidades en tu empresa es esencial para prevenir delitos. Disponer de vías anónimas para informar de conductas sospechosas puede evitar que una irregularidad se convierta en un delito.
- Evaluación y revisión constante: El compliance no es estático. Las auditorías internas y la actualización de protocolos permiten adaptarse a nuevos riesgos o cambios normativos.
Reducción de penas y protección frente a la responsabilidad penal
Uno de los beneficios más tangibles del compliance penal es que puede actuar como atenuante o eximente de responsabilidad penal para la empresa.
La jurisprudencia española valora de forma positiva que una empresa implante un sistema de prevención eficaz antes de que pueda cometerse un delito.
Esto significa que si, a pesar de todo, dentro de la empresa se comete un delito de alzamiento de bienes por parte de un empleado o directivo, la empresa verá reducida su pena o incluso podría quedar exenta si demuestra que tomó todas las medidas oportunas para intentar evitarlo.
Es decir, las consecuencias serían sólo para el autor material del alzamiento de bienes.
Jurisprudencia y respaldo judicial
El Tribunal Supremo ha resaltado en varias sentencias la relevancia que otorga a los programas de compliance penal como buena praxis empresarial.
Considera que su implantación, no sólo demuestra una voluntad clara de cumplir la ley, sino que contribuye a dificultar la comisión de delitos económicos tales como el alzamiento de bienes.
Compliance penal: una inversión en confianza y protección
El compliance penal no solo va a cumplir con una función preventiva: protege la reputación, refuerza la credibilidad empresarial y puede salvar a la empresa de sanciones graves.
Para cualquier empresario que desee blindar su negocio frente a responsabilidades penales, la implementación de un programa de cumplimiento legal no debería ser una opción, sino una obligación preventiva.
En definitiva, contar con un sistema de compliance penal eficaz es la mejor forma de garantizar que tu empresa actúa con integridad, transparencia y dentro del marco legal, incluso en los momentos más difíciles.
Implantar sistemas de Compliance Penal ahorra muchos disgustos a cualquier empresa.
Consejo: Prevenir es siempre más fácil, tiene menores costes y es más efectivo que solucionar un delito penal.
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