Aunque en la normativa penal española no se da una definición de dolo, el artículo 5 del Código Penal establece que no hay pena sin dolo o imprudencia y el 10 que: “Son delitos las acciones y omisiones dolosas o imprudentes penadas por la ley”. Pero ¿qué es el dolo?, ¿qué tipos de dolo existen? En este artículo te contamos todos los detalles. 

En base a lo anterior, podemos concluir que en derecho penal español se aplica el principio de culpabilidad que supone que para que se pueda imponer una pena a una persona es necesario que exista culpa o que se le pueda responsabilizar de lo sucedido. Las dos formas de culpabilidad son el dolo y la imprudencia. 

¿Qué es el dolo?

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En el diccionario de la RAE se define el dolo como la voluntad deliberada de cometer un delito a sabiendas de su ilicitud. 

El dolo se produce cuando se realiza una acción o una omisión con pleno conocimiento de lo que se está haciendo. Por lo tanto, el dolo es la voluntad de una persona de hacer una o varias acciones que infrinjan un daño a otra persona. 

Por ejemplo, no es lo mismo robar un producto en un supermercado sabiendo que se comete el robo, que atropellar a una persona con un coche debido a un despiste. En el primer caso existe dolo y, en el segundo, imprudencia. 

Por lo tanto, lo que caracteriza al dolo son dos elementos: el conocimiento y la voluntad. 

¿Qué tipos de dolo existen?

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Podemos distinguir los siguientes tipos de dolo en derecho penal español: 

• Dolo directo de primer grado o dolo intencional. En este tipo de dolo prevalece la voluntad de realizar el hecho. 
• Dolo directo de segundo grado o dolo mediato. En este supuesto predomina el conocimiento sobre la voluntad. 
• Dolo indirecto o eventual. En este caso la persona que comete delito sabe que su acción puede producir un daño que no pretende, pero hace la acción. 

¿Son diferentes el dolo penal y la culpa?

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Ya hemos visto que para que exista dolo es necesario que exista una voluntad de cometer un delito sabiendo que es ilícito. Sin embargo, en derecho penal podemos hablar también de culpa cuando se produce una omisión del cuidado debido. 

Por otro lado, debemos distinguir, en el ámbito de las infracciones contra el patrimonio, el dolo penal que supone la existencia de una voluntad de defraudar (desde el punto de vista penal) y el dolo civil, en base al cual se produce un incumplimiento contractual.  Sin embargo, estos dos conceptos, en ocasiones, es complicado diferenciarlos y se deben analizar los hechos anteriores, simultáneos y posteriores para poder determinar ante qué clase de dolo estamos. 

Por lo tanto, el dolo es un elemento esencial del derecho penal español y es esencial, si tienes un problema penal, que un abogado penalista analiza el caso para determinar las circunstancias y la posibilidad de probar la existencia o no de dolo.