Hay muchos casos en los que es fundamental el informe pericial en el proceso penal. Por ejemplo, imaginemos que una persona falsifica la firma de otra en un documento. Para probar la falsedad de la firma, será necesario el informe pericial de un perito grafológico. En el artículo de hoy te contamos: en qué consiste el informe pericial en el proceso penal, donde se regula, qué requisitos debe reunir el perito, quien lo nombra y cómo se puede impugnar un informe pericial. 

¿Qué es un informe pericial y dónde se regula?

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El informe pericial para el proceso penal se regula en los artículos 456 y siguientes de la Ley de Enjuiciamiento Criminal. El informe pericial es un documento que incluye un estudio realizado por un experto en una determinada área y sobre la que existe una controversia en el proceso. El objetivo es ayudar al juez aportando conocimientos técnicos y científicos que éste no tiene.

Para que el informe pericial tenga validez judicial debe realizarse en base a una serie de principios que son los siguientes: 

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• Decir la verdad
• Actuar con independencia de la persona que pague el informe
• Colaborar con el juez, ya que la función del perito es ayudar a la justicia
• Aportar conocimientos técnicos a personas que no son expertas en una determinada materia.

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Cómo se designa al perito y en qué casos se puede recusar

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El perito se puede designar tanto por el juez como por alguna de las partes. La recusación del perito se puede solicitar por alguna de las siguientes razones: 

• Debido a la existencia de un parentesco de consanguinidad o de afinidad dentro del cuarto grado con algunas de las partes en el proceso penal. 
• Por la existencia de un interés directo o indirecto en la causa que se conoce en el proceso penal o en otra semejante.
• Por la existencia de una amistad íntima o enemistad manifiesta con alguna de las partes. 

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¿Qué tipos de peritos existen?

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En base al artículo 457 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal los peritos pueden ser de dos tipos: titulares y no titulares. Los primeros son aquellos que tienen un título oficial de una ciencia o arte cuyo ejercicio está regulado por la administración. Los peritos no titulares son los que no tienen un título oficial, pero tienen conocimientos o práctica en alguna ciencia o arte. 

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¿Es posible impugnar una prueba pericial?

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La respuesta es que sí. La impugnación de la prueba pericial se puede hacer de diversas formas y el objetivo es siempre intentar que el juez no tenga en cuenta la prueba pericial aportada por la otra parte. 

Para la impugnación de la prueba pericial se puede alegar la imparcialidad del perito por incumplimiento de las normas generales que hemos visto y también se puede impugnar el contenido del informe pericial o el procedimiento por el que se ha elaborado. Por lo tanto, una de las formas más efectivas de impugnar una prueba pericial es aportar otra un informe pericial de parte. 

Tanto para recusar el nombramiento de los peritos de la otra parte como para la elaboración de un informe pericial que defienda la versión de los hechos de una de las partes, es fundamental la intervención de un abogado penalista experto.